La Comisión Provincial por la Memoria (CPM) es un organismo público, autónomo y autárquico creado en 1999 por resolución legislativa y ratificada por ley provincial en el año 2000. Está integrada por reconocidas personalidades provenientes de organismos de derechos humanos, de congregaciones religiosas, de los ámbitos judicial y legislativo, de la Universidad, de la esfera sindical y de la cultura.
La presiden el Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel y Dora Barrancos.
Desde su creación, la CPM tiene bajo guarda el archivo de la Dirección de Inteligencia de la Policía de la Provincia de Buenos Aires (DIPPBA). Se trata del primer fondo documental de los servicios de inteligencia abierto al público en la República Argentina. Es un extenso y pormenorizado registro del espionaje político ideológico practicado sobre personas a lo largo de más de medio siglo.
La gestión de este archivo da respuesta a la consulta de ciudadanas/os que requieren copia de la documentación que la DIPPBA produjo sobre ellos o sobre sus familiares, a investigadoras/es y a la Justicia federal, donde tramitan las causas por crímenes de lesa humanidad.
La DIPPBA se creó en 1956 y funcionó hasta 1998, cuando en el contexto de una reforma de la Policía bonaerense fue disuelta y se cerró su archivo. En ese año comenzaban a desarrollarse los denominados “Juicios por la Verdad”, donde se investigan los circuitos de desaparición de miles de personas en la provincia de Buenos Aires durante la última dictadura militar (1976/1983), y la Justicia federal de La Plata dictó una medida de no innovar sobre el archivo de la DIPPBA, por considerar que sus documentos podían aportar pruebas. En diciembre del año 2000 el gobierno provincial transfirió el archivo a la CPM, creada en agosto de ese año, para que lo convirtiera en un “Centro de información con acceso público tanto para los afectados directos como para todo interesado en desarrollar tareas de investigación y difusión” (ley 12.642). En 2003 la Cámara Federal de Apelaciones dejó sin efecto parcialmente dicha medida de no innovar, que continúa temporariamente sólo para la documentación del período 1976 / 1983.
El archivo consta de aproximadamente cuatro millones de fojas cuyas fechas extremas son 1957 y 1998 (aunque existen también documentos de la década de los ‘30). Está organizado por fichas ─hay más de 200.000 fichas personales─ y legajos.
Cada legajo se compone de informes de inteligencia, panfletos, volantes, fotografías, recortes periodísticos, publicaciones, memorandos (escritos breves utilizados para transmitir recomendaciones o pedidos entre distintos departamentos u organismos, e intercambiar información), entre otros. Esa diversidad permite un acercamiento a varias voces que enriquece el relato histórico. Por otro lado, el fondo documental refleja la vigilancia extendida a toda la provincia de Buenos Aires así como a la Capital federal y, en menor medida, al resto del país. Ciudades grandes y localidades pequeñas integran el amplio espectro del fondo DIPPBA.
Los legajos se encuentran organizados por “factores” y “mesas” de trabajo: